El Universal, Primera, pág. 27, Sin autor.
No a la modificación de la Ley de Transición Energética
Al Senador David Penchyna Grub Presidente de la Comisión de Energía,
Al Senador Salvador Vega Casillas Secretario de la Comisión de Energía,
A las y los integrantes la Comisión de Energía en el Senado de la República:
México, como el resto de los países, tiene el deber de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de acuerdo a las metas comprometidas ante la comunidad Internacional. Uno de los sectores claves en este esfuerzo es la generación de energía eléctrica, que en nuestro país depende de 83 al 86% de fuentes fósiles y apenas un 14 a 17% de fuentes limpias.
Las metas de reducción de GEI comprometidas por México para el sector eléctrico requieren que la industria de generación reduzca sus emisiones en 63 millones de toneladas para 2030, con respecto a las 202 millones de toneladas que se emitirían si todo siguiera igual. Estas metas quedarán incorporadas junto con las de otros países como parte del nuevo acuerdo climático global que se firmará en la reunión de París (COP 21) al final del año.
El gas natural no es una energía limpia. Es un combustible fósil no renovable que aunque produce menos GEI que el carbón o el combustóleo, genera una cantidad importante de emisiones cuando se quema para producir electricidad. En el caso de la extracción de gas a través de fracturación hidráulica (fracking), impulsada en el marco de la Reforma Energética se ha demostrado que si se toma en cuenta toda la cadena energética, las emisiones de GEI superan a las de otros combustibles fósiles convencionales.
El sector acerero propone: que el gas natural sea considerado energía limpia que la recuperación de calor de las plantas de ciclo combinado sea considerada como co generación eficiente; y que, por todo ello la generación de electricidad con gas reciba certificados de energías limpias. Algo que sería inconcebible en el resto del mundo. De considerar al gas como energía limpia, México haría un ridículo global porque solo por cambiar definiciones estaríamos entre los países más “verdes” del planeta en el sector energético.
El sector acerero afirma que la integración de energías limpias a la red eléctrica aumentará en 15% los costos a la electricidad, sin embargo estos números no coinciden ni con los datos oficiales de la SENER ni con los de expertos independientes. En declaraciones recientes, la SENER afirma que el incremento solo sería entre el 1 y el 2%. El avance acelerado de las energías renovables en muchos países emergentes demuestra que sus costos son competitivos y que ofrecen beneficios ambientales y en salud importantes.
Señoras Senadoras y Señores Senadores, por las razones expuestas el Proyecto de Dictamen de la Ley de Transición Energética NO DEBE SER MODIFICADO. Instamos a que la Comisión de Energía la dictamine y se apruebe en sus términos actuales dentro de los siguientes días. Su aprobación permitirá que México muestre congruencia con acciones e instrumentos para reducir las emisiones de GEI en el sector eléctrico y cumplir, con ello, con los compromisos adquiridos de cara a la COP21 de París.
Fuente: El Universal