México solicita su ingreso a la AIE, con aval de EU y Canadá: El Economista

El Economista, Empresas y Negocios, pág. pp-23, Karol García.
Ante la huella de carbono, destacan la necesidad de transitar aceleradamente hacia un mayor uso del gas natural y las energías limpias.
Durante su participación en la Reunión Ministerial de la Agencia Internacional de Energía (AIE por su sigla en inglés), celebrada en París, Francia, el secretario de Energía, licenciado Pedro Joaquín Coldwell, entregó a nombre del gobierno de la República una carta para formalizar la solicitud de México e integrarse a este organismo internacional.
Ante el director de la AIE, Fatih Birol, y representantes de los países que acompañan a México en su propuesta (Estados Unidos y Canadá), el titular de la Secretaría de Energía indicó que la AIE ofrece un espacio para desarrollar respuestas conjuntas y esquemas de cooperación mundial para garantizar la seguridad energética, promover el desarrollo económico y fomentar la sostenibilidad ambiental a nivel global. El secretario Pedro Joaquín Coldwell estuvo acompañado por su contraparte de Estados Unidos, Ernest Moniz y el de Canadá, James Carr.
Joaquín Coldwell destacó que la AIE se consolida como el foro de política energética más importante a nivel mundial, adaptándose a las nuevas circunstancias del entorno y sumando la representación de una pluralidad de naciones productoras y consumidoras de petróleo.
También destacó que debido a que dos terceras partes de las emisiones de carbono son producto de la industria energética, se hace patente la necesidad de transitar aceleradamente hacia un mayor uso del gas natural y las energías limpias, algo que se pondrá en relieve en la próxima reunión de la COP21.
El proceso de adhesión de México incluye una visita inicial de un equipo de la AIE, una revisión de política energética y de compatibilidad con el marco jurídico nacional y un diagnóstico de respuesta ante emergencias.
La Agencia Internacional de Energía es un organismo autónomo, que entre sus objetivos tiene que procurar que la energía sea confiable, económica y limpia para los habitantes de sus 29 países miembros; además, ésta forma parte de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
Fuente: El Economista